Gregorio Briz ha exigido la dimisión de la consejera responsable de Educación, Dolores Serrat, “porque está planteando medidas que ponen en peligro la calidad de la escuela pública cuando lo que debería hacer es defenderla”.
Briz ha denunciado hoy en rueda de prensa los recortes de una media del 10% en los cupos de la plantilla de profesorado para los centros educativos y el aumento de ratios, entre otros, y ha mostrado su apoyo a Marea Verde “porque la comunidad educativa sabe lo que esto significa y está luchando para evitar que ocurra”.
Para Briz, “en septiembre, los recortes serán todavía peor en la realidad de lo que parece sobre el papel, y será imposible hacerse cargo de lo mismo con ese 10% menos de profesorado”. La propia consejera reconoció ayer ante el Consejo Escolar de Aragón que podría haber cerca de 1.000 profesores menos contratados, aunque los sindicatos calculan que serán muchos más.
La representante de CHA en el Consejo Escolar, Julia Cortés, ha denunciado por su parte que Serrat planteara ayer a este órgano consultivo que los recortes son “inevitables” y que los inscribiera en la necesidad de anteponer el interés general a cualquier otro: “¡es que la educación es de interés general”, ha replicado Cortés, que ha lamentado que para el Gobierno de Aragón sea vista “solo como un gasto y no una inversión”.
Aunque preguntó a la consejera qué iba a pasar con los sueldos del personal sustituto, de refuerzo e interinos, es decir, si se iban a seguir o no pagando en verano como hasta ahora (por más de 165 días trabajados), Serrat no contestó.
El portavoz de Educación en Cortes ha concluido su comparecencia criticando que, en esta coyuntura, el ministro José Ignacio Wert haya planteado también una nueva reforma legislativa para sustituir la LOE por la LOMCE, Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa.
“Sería la sexta ley de la democracia y nacería por imposición, sin estabilidad, sin consenso y sin presupuesto para acometer ninguna reforma que en realidad redunde en la calidad”, ha señalado. Para Briz, las medidas que ha avanzado Wert “priman sólo lo cuantitativo, la competitividad, la excelencia y la tecnificación” con lo que la consecuencia será “la implantación de una educación segregadora y excluyente, jerarquizada y elitista, en la que volverá a haber listos y tontos y buenos y malos”, ha afirmado, expresando el rotundo rechazo de CHA a esta concepción de la educación.